Maduro ordena criminalizar a los “comanditos” de María Corina Machado
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha ordenado a altos oficiales y funcionarios del régimen perseguir y criminalizar a los “comanditos” organizados por la líder opositora María Corina Machado. Este grupo, que Machado instó a organizar en sus discursos, se ha convertido en una herramienta clave para movilizar a los votantes y defender el voto.
Maduro advirtió públicamente sobre un supuesto ataque con granadas planeado para el 3 de agosto, cuando Machado había convocado una concentración en Bello Monte. Sin embargo, la gran movilización opositora demostró que las acusaciones de Maduro eran infundadas, ya que miles de personas se congregaron sin incidentes violentos.
Planeaban actos de terrorismo, lo que justificó la movilización de fuerzas militares y policiales en todo el país. A pesar de estas acusaciones, Machado y sus seguidores mantuvieron la calma y continuaron con sus actividades pacíficas.
La campaña de criminalización contra los “comanditos” ha sido liderada por el Comandante Estratégico Operacional de la Fuerza Armada, General Domingo Antonio Hernández Lárez. Ha calificado a los miembros de estos grupos como “mercenarios nazi fascistas” y ha prometido capturarlos y someterlos a la justicia. Esta retórica ha generado un ambiente de hostilidad y temor, con numerosos detenidos acusados de pertenecer a estos grupos.
Maduro y sus altos funcionarios, como el canciller Yvan Gil y el Ministro del Interior y Justicia, Remigio Ceballos Ichaso, han difundido mensajes en redes sociales y medios de comunicación estatales, satanizando a los “comanditos” y vinculándolos con el narcotráfico y el terrorismo. Además, se han anunciado múltiples detenciones de presuntos miembros de estos grupos en diferentes estados del país.
Esta escalada de tensiones y la militarización de las calles han generado preocupación tanto dentro como fuera de Venezuela. Observadores internacionales temen que la situación pueda derivar en una mayor represión y violencia contra los ciudadanos desarmados, quienes solo buscan participar en la vida democrática del país.
El contexto de estas acciones está enmarcado en un escenario electoral conflictivo, donde la oposición venezolana ha denunciado fraude en los recientes comicios que ratificaron a Maduro como presidente. Las manifestaciones de protesta han resultado en numerosos muertos y detenidos, evidenciando la profunda crisis política y social que atraviesa Venezuela.